Nunca he tenido miedo a la muerte, nunca, y hoy menos si sé, me esperas al otro lado Papito, sueño con el día en que vuelva a abrazarte.
Esta semana te he soñado todos los días, hoy por ejemplo soñé que caminábamos por la playa, y luego estábamos en el hospital, como pasó... No te veo sonreir en mis sueño, no todavía, o tal vez yo no sonrío todavía, no estoy lista para dejarte ir.
Me dueldes cada día Papito, ojalá hayas serntido cuanto te amé.
Madeleine
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