domingo, 9 de agosto de 2020

Ambato inolvidable

No cambiaría la noche en la que nos conocimos por nada, como brillaban las estrellas al reencontrarnos en esta vida…

Pudimos ver como la ciudad dormía mientras tu conducías tu Mercedes, y luego bailamos, Dios que hermosa noche, todo estaba cambiando y se estaba dibujando en mi brazo, NY se veía tan hermoso de tu mano…

Y durante estos años, diciéndonos a nosotros mismos, y el uno al otro, es solo el encantamiento de esa “mágica noche”, alimentando nuestras almas de recuerdos… y aún sin nuevos momentos compartidos, el hechizo se rehúsa a desaparecer, a pesar del paso de otras personas por nuestras vidas, el tiempo y la distancia.

Hay algo vibrando aún muy fuerte entre nosotros, es tan oscilante cada vez que nos volvemos a conectar...

Hoy, toma un lápiz, ponlo sobre mi espalda, dibuja en mi piel, línea por línea, tráeme a la vida.

No puedo empezar de nuevo, no hay un borrador. Todo está en blanco hasta que me dibujes; y esta vez, colorea fuera de los bordes, sólo entre los dos podremos hacer de esta historia, algo aún mejor.

Píntame como tú quieras, diséñame el camino, yo te acabo de dibujar a mi manera.

Madeleine

Re escrito hoy, en agosto 09 de 2020, para Germán, indudablemente.

1 comentario:

  1. Ooohhh es verdad, es lo que pasamos, ahora que me lo recuerdas pues sí, es la historia de una Quiteña ý un Riobambeño que un día empezó en Ambato. Me gustó mucho, sacaste tu parte de Escritoria y Periodista, muy bien te quedó, super bien :):):)

    Germán Segovia

    Riobamba, agosto 09, 2020

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