Entrando a la tercera semana de su partida, no hallo consuelo...
Sé que debo poco a poco poner de parte y comenzar a aceptar pero me está costando mucho, no paro de llorar.
Es que no le encuentro sentido a la vida sin él...
Madeleine
Escrito con el corazón en la mano todavía, en Quito, a mediados de febrero de 2020.
No hay comentarios:
Publicar un comentario