En este punto de mi vida yo ya aprendí que las personas no se quedan para siempre así que me confirmo con coincidir un momento, aprender de ellas y de su compañía para que cuando se vayan pueda decir adiós sin ningún tipo de rencor.
Encontrarte ha sido una suerte de milagro, de esos que pasan una vez en mil. La conección es inegable, es grande e incluso si llegaremos a armarnos o a odiarnos, la siento tan fuerte que seria imborrable y así vivamos un ratico o días que se conviertan en años, creo que siempre sentiríamos cariño en nuestros corazones y una parte del uno viviría en el otro. Lo que nos pasa es inusual, es como si nos conociéramos de antes, de toda la vida, de otras vidas. Dicen que las almas cuando se reconocen, no se sueltan, ni con el pasar de las circunstancias ni de los años, ojalá nos pasará esto...
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