Terminamos la remodelación

Los pies te llevan a donde el corazón quiere ir, porque cada pisada que das, te hace descubrir el potencial que tienen tus piernas, tu mente y tu voluntad.

Han pasado ocho meses desde que nos entregaron el departamento e iniciamos la remodelación, han sido semanas y meses de polvo, escombros y ruido que por fin terminaron y hoy puedo ocuparlo. 

Todo esto no se hubiera podido lograr sin el cariño y dedicación de personas maravillosas que de una u otra forma colaboraron a que este sueño se hiciera realidad.

Gracias Milton Xavier por la vista con la que despertaré cada mañana, gracias Glenda y Jimmy por ser los Supervisores Virtuales del Proyecto, por estar pendientes y por dar seguimiento a cada paso que daba, gracias a los tres por su tiempo, ustedes pusieron un granote de arena y se los agradezco enormemente.

Gracias a los amigos que desde su celular aguantaron las mil fotos de cada pared derrumbada por aquí y ventana abierta por allá que compartí con ustedes y tan gentilmente celebraron cada paso, gracias por ser parte de esta alegría.

Gracias Primos y Tíos por alegrarse de corazón y en especial gracias Mogui por tus palabras y tu Fé.

Un gracias infinito a mis papás que fueron mi apoyo incondicional, por ver el potencial que tenía el depar a pesar de los mil muebles que había cuando lo vinimos a conocer, gracias Pa por manejar continentes en busca de cada acabado que hoy reviste este lugar.

Y un gracias especialmente dedicado a mi Mamá que ha sido la Residente de Obra, mi soporte, mi abasto de energía inagotable y de paciencia infinita en esta locura llamada remodelada, por ser la persona que más confió en mi para llevar a cabo este proyecto, por no perder la fuerza cuando terminar parecía inalcanzable, por no dejarme botar la toalla a mitad del proyecto y principalmente por sonreír con cada avance de la obra que el día de hoy por fin ve la luz.

Familia y amigos, que esta sea la primera de muchas visitas. 

¡Bienvenidos todos!

Ce.