lunes, 6 de junio de 2011

Mi pequeña Ale:

Para cuando cumpliste dos años, esperaba escribirte, al regreso de la playa y con todas las pilas puestas, era un viaje especial, la familia reunida frente al mar después de muchos años y esta vez con dos integrantes más, tu mami y tu.
Allá nos fuimos y fue tan grato, mirarte con el mar de fondo, ver tu carita justo en el medio del cielo y el mar, y escucharte decir, tu ahora famoso: “Ahí mene mar”, pero nuestro viaje se vio interrumpido. Triste fue el regreso, y más el llegar a casa, nos habían robado!, en fin, te contaré, en general, este año no ha venido fácil, a esta pena se le adelanta mi salida del trabajo hace casi un año y otro robo. Ahora estoy aquí, esperando a que el viento sople a favor. 
Pero no todo ha sido desolador, también este año, ha sido como tu dirías “especial”, me he quedado en casa contigo, con suerte he podido verte crecer, he reído con tus ocurrencias, aprendido de tu noble forma de ser y maravillado cada día con tus avances, pero especialmente con tu sonrisa.
Verás, empecé a escribirte meses atrás, y aunque tiempo libre es lo que tengo, a ratos las fuerzas me faltan. Voy avanzando con lentitud y para cuando termine esta carta tendrás ya dos y medio años y con suerte no tres.

Pasan los días y trato de que aprendas de a poco pequeñas cosas y las asimilas tan rápido que es un gusto enseñarte, ahora mismo ya sabes diferenciar cuando algo esta “fío fío” o “chis” (caliente), lo que es “jane” o “pequenito” y reconoces ya algunos animales: los “pajitos”, las “mocas”, los “pegitos” pero a mi me encanta oírte decir “jato”. El otro día, te mostraba unos “maitos” nuevos, que recorté para ti de unas revistas, no te imaginas la cara de susto que pusisite al ver un dinosaurio de grandes dientes, jaja pobrecita.

Conoces también los colores, y te gusta reconocerlos en cada cosa que encuentras, así, no es difícil escucharte distinguirlos en la ropa que llevas puesta, “ashul, veye y baco, motate, modado y nosa”, el otro día te pregunté si tenías un favorito, el “nojo” dijiste con fuerza, y me sorprendiste. Bien escogido preciosa, el color de la alegría, de la energía, del amor.

Había leído que a tu edad lo que importa es enseñarte a amar, y es exáctamente lo que hacemos día con día, contigo no es difícil, tu lo inspiras.

Feliz cumpleaños atrasado querida sobrina y que lindos días vengan a ti.

Tía Ce.

 Escrito en Quito, en febrero 20 de 2010

No hay comentarios:

Publicar un comentario