Plana completamente, se trata de Sabrina y mi primo Sebastian, de 26 y 31 años, quienes después de una relación de 7 años finalmente decidieron unir sus vidas para siempre y en mi cumpleaños, si justo en mi día. Nada que destacar, tal vez solo la delicada decoración vintage color pastel, mas bien un detalle con el que no comparto y es que después de la cena, la novia quien tenía un vestido blanco tipo princesa se fue al cambiar y apareció con un vestido color turquesa quedando como una invitada más, yo no me lo hubiera quitado en toda la noche, lo hubiera disfrutado hasta el final.
En fin, lo mejor de la boda, llegué tarde y me fui temprano y pasé con mi sobrina Sol en brazos, un largo rato mientras sus padres bailaban, nada más que decir, una boda más, una de tantas...
Ce.
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